miércoles, 13 de julio de 2011

¿Rebajas? JA!


Hola queridos/as. Hoy voy a hablaros del fabuloso mundo de las R-E-B-A-J-A-S, contando mi propia experiencia personal e intrasferible ^ ^(chiste malo).

(Esto está basado en una historia real)

Bien, todo comenzó ayer, un bonito día, salgo de casa. Yo iba como un pincel, una mezcla entre casual y marine chic que tanto se lleva en vacaciones y una lluvía inintermitente comienza al pasar la esquina, las baldosas asesinas llenas de agua me dejan 3 pegotes de barro en el pantalón.
Total que llego al Centro comercial chorreando por la lluvia (sin pargüas, qué mitico en mí), el calzado mojado y los 3 pegotes en el pantalón. (Que no cunda el pánico, pienso).
Entro en la primera tienda que veo, mucha ropa, tanta que me satura, dependientas chonis hablando sobre lo cruel que es su novio/amante/folloamigo/y equivalentes.
Observo, todo parece extraño, como masivo, me horroriza ver a las señoras rebuscando en los montones TODO A 10 EUROS. Me recuerdan a los documentales donde los buitres se comen lo que dejan los leones. Que sí, eso para su Manolo, que sí aquello para su yerno. Ya verás que bien le sienta.....Mientras observo, no me convence nada, todo parece de otras temporadas, incluso sucio!.
Sigo mirando, cuando noto una mano en mi espalda, me giro, es una señora, la de antes del montón. Me mira, me dice que si le puedo coger un bolso de los de la estantería de arriba, le digo que no llego. Me dice, ofendida, pues vete a por una escalera. Me quedo pensando, extraño todo. Me sigue mirando como diciendo, venga muévete, le digo que yo no trabajo aquí. Se disculpa y se va ofendida a la dependienta choni criticona.
Sigo vagando despreocupadamente, cuando, de repente, aparece!, esa prenda que te encanta y destaca como iluminada entre el montón de cosas revueltas y manoseadas. La coges, te fascina y cuando vas al probador feliz descubres que.... No es de tu talla!.
Tranquilidad!, piensas. A lo mejor hay más en el almacén.
Vas a la dependienta choni que sigue hablando de lo cruel que es su novio, esperas, puesto que estar delante de ellas con una prenda en la mano, es mucho menos importante que su novio la llame solo cuando el quiere, le dices amablemente si tienen otra talla y entonces ocurre.
Te mira, mastica su chicle salvajemente, pone cara de ofendida y dice: Lo que ves es lo que hay. Se gira y sigue despotricando con la otra dependienta que me mira de reojo como diciendo: ¿En serio nos molestas para eso?.
Porque sí queridos/as, las dependientas de ciertas tiendas deben de tener por contrato ser bordes por naturaleza. Lo que veis es lo que hay, no te escupen a la cara por no gastar saliva ¬ ¬
Salgo de la tienda, emprendo el camino a la de enfrente, más de lo mismo. Un momento!, mira esto, que bonito todo, lo pruebas, te sienta bien, miras la etiqueta y TACHÁN nueva temporada, precio de siempre. Me resigno, pago y me voy.
Rebajas, ja! siempre lo mismo, todo rebajado pero acabas comprando, al menos yo, las prendas al precio de siempre. Buen intento, tal vez el año que viene...

1 comentario:

Atlántida dijo...

Ese es el truco, en las rebajas sólo esta lo de otras temporados, lo más horroroso y al lado luciendo en todo su esplendor la nueva temporada, yo tambíen me he ido resignada: un par de zapatos, dos pantalones, 3 camisetas y 3 conjuntos de ropa interior, todo temporada otoño. arrggg!!
me encanta tu descripción de las dependientas chonis ¡mujer! mira que pensar que preguntar por una prenda de tu talla era más prioritario que el mal comportamiento de su novio. Ays...